Una sonrisa y un beso,
una caricia de terciopelo.
Un guiño y un "te quiero",
una parada en un tiempo sin tiempo.
Una derrota y el infierno,
un ¡no me importa,
no tengo miedo!
La amenaza y el desconsuelo, alguien a mi lado,
que me dice: ¡que puedo!
Lo simple adquiere un valor importante,
si llega el contratiempo... ¡no hay plaza vacante!
Siento Mis Latidos
3 comentarios:
Y tus latidos son tu propio aliento
Paz y Risas
Isaac
Tener a alguien al lado minimiza los contratiempos. Que los latidos auguren bienes. Un abrazo
Qué precioso lo que expresas. La contemplación y la comprensión de lo que "fue" y lo que "es" y nosotros espectadores de nuestras vidas, proporcionando a las cosas su dimensión de profundidad por pequeñas y sencillas que parezcan. Mientras latan en nuestro interior y tengamos con quien compartir...
Un abrazo
Publicar un comentario